Juntos hicimos realidad un jardín de rosas, lleno de esperanza, en el escenario del Gran Teatre del Liceu

“Yo imagino que mi cuerpo es como una matrioska con distintas partes. Que cada parte es un sentimiento o un grupo de sentimientos que son más visibles o menos”. 

“Trabajar desde la asociación para ayudar a otras familias que pasen por lo mismo que vivimos es para mí una necesidad”

La Fundación Enriqueta Villavecchia, entre los 91 proyectos seleccionados

“La imagen tiene que ser sincera; las fotos con sentimientos no pueden ser bodegones”

“Se trata de poner las capacidades de cada uno al servicio del voluntariado”

“La misión final del registro es que los pacientes estén bien”

“La mejor manera de acompañar la tristeza es el amor”

“Hacer de  voluntaria en la Fundación me ha permitido conectar con los pacientes des de otro lugar, lejos de la realidad del día a día en el hospital”